FUTBOL. EVOLUCION

¿Ha evolucionado el juego del fútbol ?. Entendemos que si. Ello circunscribiendo el tema a lo estrictamente deportivo y a lo que surge de lo que realizan los jugadores dentro de la cancha.- Paulatinamente, esto comienza a visualizarse en nuestro país a partir de fines de la década del 40. Consolidándose luego en las décadas del 50 y 60.-

Es adecuado fijar entonces un hito aproximado entre el "antes" y el "después". no tanto por establecer un momento determinado, sino para clarificar más concretamente las distintas posiciones que podrían esgrimirse. Sería mucho más cómodo decir "antes", en el sentido más amplio y apelar a los hechos según sea la oportunidad que más nos convenga.-

Parece asumirse que el juego de "antes" era más atractivo. Más goles, se dice que mejores jugadores, lujos, gambetas, etc. En síntesis un espectáculo más ameno y divertido. Pero ¿divertido para quien ?.Porque en general, esas exquisiteces y otras eran producidas por jugadores que militaban en determinados clubes. Eran cuatro o cinco equipos que ganaban, goleaban, gustaban y salían campeones. Claro, ello jugando contra otros catorce o quince equipos que parecían partenaires; estos perdían, eran goleados y no gustaban, porque perder, ni en el potrero convence. Ni antes ni ahora. Tampoco alcanzaban el subcampeonato, algunas veces el tercer puesto.-

La misma situación reaparece posteriormente, en oportunidad de la participación de clubes del interior, los que, como se advirtió en los resultados, no estaban en condiciones de competir, al menos decorosamente con los que están directamente afiliados a la A.F.A.-

Todo lo narrado es historia, cita necesaria para explicar ahora el proceso evolutivo que sugerimos: el que comienza con una despaciosa utilización de recursos fundamentalmente defensivos que, no impedidos por la reglamentación vigente, no eran empleados hasta entonces, por un falso respeto al desarrollo del juego, que como se vio, favorecía a los ¨GRANDES´´.-

Como a decir verdad. mucho no se ha inventado, se hacen masivas facetas del juego permitidas por el reglamento, utilizadas con anterioridad esporádicamente, que favorecen la contención de los más hábiles y que por ende, tienden a evitar caer en el ridículo por la goleada o por el "paseo".-

Se va descartando el concepto de aceptar la impotencia y entonces se apela a una marca más apretada, quite de la pelota sin preocuparse demasiado por el destino posterior de la misma, juego para atrás, incluso con la mayor participación del Arquero; refuerzo cuantitativo de la defensa, sacrificando delanteros; utilización más continua del fuera de juego, que en muchas ocasiones inhibe psicológicamente al atacante, cuando reiteradamente queda orsai, etc.-

Siempre este análisis gira en torno de lo que el reglamento permite, o por lo menos no inhabilita. Las transgresiones corren por cuenta de quienes tienen la función de hacer respetar las reglas establecidas.-

Retomando el hilo, tal forma de encarar el juego permite una participación más equilibrada del grueso de los conjuntos, sin que signifique lograr una paridad total. Pero si "antes" llegaban a perder 3 a 1 decorosamente, conseguir el 0 a 1 en un principio y luego el 0 a 0, fue un excelente mejoría, que en muchas ocasiones y en una escapada afortunada, podía llegar a transformarse en 1 a 0 para el bando más débil.-

Esta idiosincrasia "resultadista", en el sentido que con menos, algo se podía lograr, no entra en colisión con el "antes", porque el juego del fútbol no admite, ni admitió otra definición que el resultado, desde su origen.-

Entonces, si jugando así se conseguían mejoras, no había razón para desestimar esta posibilidad que brinda el esquema de juego. Por el contrario, lo conveniente era acentuarla y adoptarla más tarde por todos los participantes, incluso los "Grandes", con el riesgo en algunos casos de exagerar, brindando espectáculos groseros. los que, en algún caso, motivaron la suspensión del partido, por falta de interés de los jugadores.-

Es evidente que esta evolución defensiva trajo aparejado un achatamiento en el desarrollo del juego, ya que empezaron a proliferar los resultados amarretes en cuanto a la concreción de goles y esto supone que obra en perjuicio del espectáculo. Estadísticamente se puede comprobar que las definiciones 0 a 0, entre las décadas del 30-40 y casi todo el 50, alcanzaron un promedio de 10 por año y levantan bruscamente a partir de la década del 60, llevándola posteriormente a 30 y con tendencia en aumento.-

Entonces, ¿donde esta la evolución ?.-

Estuvo desde el momento en que la ortodoxia de la estructura de los conjuntos marcaba cierto equilibrio entre los componentes; seis (6) defendían y cinco (5) atacaban. Por lo que vemos, se ha contemplado, en los orígenes de la vigencia del fútbol organizado, los dos fundamentos, ataque y defensa, aunque numéricamente se privilegió el aspecto defensivo. Siendo esto así, queda claro que tan importante era atacar, como saber defenderse.-

Hubiese sido ilógico que teniendo la posibilidad de emparejar la contienda, apelando a una de las dos alternativas reglamentarias que nos permite el juego, la misma fuera desestimada por un falso prurito. Insistimos nuevamente, hablamos de extremar recursos lícitos. "Colgados del Travesaño” -grafica expresión que lo sintetiza todo-, si con ello logramos obtener algo, campeonatos, evitar el descenso, ascensos de categoría, etc.-

En la tónica, digamos, suave, "cayeron" todos; "chicos" y "grandes", de 1ª División, categorías de ascenso, inferiores, fútbol amateurs, todos los que practican fútbol organizado, en Buenos Aires, Pumamarca, Rio Grande, etc. etc.-

Debe aclararse que no se ha omitido, para este análisis teórico del tema, el hecho circunstancial de las implicancias casuales del juego. Siguieron siendo como tales, aún a partir de la "evolución" que sugerimos, lo que significa, en muchas ocasiones, resultados o formas de práctica distintas a lo que denominamos "evolución defensiva". Del mismo modo "antes", aunque esporádicamente, se daban partidos contrarios a la "ofensivas" generalizadas.-

Entendemos que si esta evolución producida, provocaba el desinterés de la aficción y por ende su alejamiento de las canchas, los Organismos encargados de su reglamentación debieron cambiar aspectos importantes del juego y volcar el favoritismo hacia el concepto ofensivo, permitiendo que, con otras normas, se impusiera un desarrollo agresivo hacia el arco contrario.-

Ni más ni menos como lo que se hizo en el basketball, donde "antes", al retenerse el balón, se registraban resultados muy contenidos, por lo tanto se decidió penalizar ese recurso defensivo y con ello se logró favorecer la intención ofensiva de los equipos.-

El mismo fútbol ahora nos están dando un ejemplo al cambiar la puntuación, que fue llevada de 2 a 3 puntos por partido ganado y la imposibilidad de recurrir con el pié, a su propio arquero para que este la tomara con sus manos, lo que determinó que ya no es tanto negocio privilegiar el aspecto defensivo, pero, por lo menos por ahora no se lo ha desestimado por completo.-

Ojala estas últimas modificaciones, marquen el inicio de otras, que tiendan a favorecer el desarrollo ofensivo del juego. Esta sería nuestra posición, que en manera alguna se opone a lo expuesto más arriba, ya que hemos querido destacar que, teniendo la posibilidad de utilizar más férreamente un "arma", que era el perfeccionar la defensa, haberlo conseguido, indudablemente representó una evolución, que consideramos importante destacar, sin perjuicio de señalar aspectos negativos que el hecho produjo.-

De paso digamos, que así como esta diagramado el juego, el resultado de 0 a 0, puede interpretarse como la realización de un magnifico partido, donde una de las parte -Defensa- superó en capacidad a la otra -Ataque-. Por el contrario un resultado abultado, puede implicar un mal desarrollo del juego, ante la defección defensiva, de uno o de los dos conjuntos, vg; goleada por más de 4 goles de diferencia o empate con muchos goles.-

Felipe Ochotorena, Enero,11 del 2008.