sábado, octubre 27, 2007

El día de Melina y Cristina

En nuestro país, estamos a menos de 45' del día en que mi hija menor, Melina, cumpla sus siete añitos; y que quien cree ser la reina mayor, Cristina, cumpla su anhelo de ser consagrada presidenta.

En estos últimos días, ambas han hablado mucho, y en diferentes ambitos: a las dos se les pide se callen ante determinadas circunstancias, se niegan a expresarse en determinados ambitos, son caprichosas, inteligentes, muy seductoras y simpáticas. Generan, inevitablemente, una gran corriente de aceptación.

Tienen grandes expectativas por este día 28/10. Están convencidas de que algo conseguirán; que es un día muy importante para ellas.

A una la amo lo mas que puede amarse.

A la otra le deseo suerte.

sábado, octubre 20, 2007

19/10. Rock duro en River


¿Es este Soda, 10 años después, la consecuencia del presente de Gustavo Cerati? Como se dijo hasta el hartazgo, la reunión de los Soda Stereo se produce en la mejor época solista de su líder y principal compositor.

El privilegio de vivir estos tiempos nos permitió a mi Manón y a mí, ver los dos últimos recitales del grupo. El de 1997 y el de 2007. Ambos en River; ambos un repaso de su historia.

La memoria, esa que deforma, nos ilumina con que aquel fue el recital de la mejor banda de pop de la historia de la música contemporánea nacional; éste, el de 2007, fue el mejor recital de rock que le hemos visto a un grupo nacional en la Historia.

Soda Stereo no se fué. Técnicamente ilustrados, con la base impecable -¿cuánto jugaron las máquinas al respecto?- el recital fue menos una reunión que la exhibición de una banda a punto. Como si el tiempo no hubiese sido tal.

Un show casi perfecto, con decisiones poderosas: no tocar El rito o Ella uso... y optar por versiones muy duras de Signos, Fue, Texturas –a mi gusto, el mejor momento de la noche- o Sueles dejarme solo. Faltó algo de emoción pero sobró justeza. Un grupo como Soda, con esa historia y ESAS canciones, con profesionalismo, necesariamente iba a hacer un concierto espectacular

Detalles: los que estábamos en la platea de acceso a campo sufrimos el sonido; la voz de Cerati nunca fue lo clara que naturalmente es y el técnico tardó un par de canciones hasta encontrar los graves exactos. En oposición, la puesta en escena y el juego de luces deben haber sido lo mejor que han presentado bandas locales en 40 años de Rock.

Aquella inicial reflexión se produce al tiempo de escuchar “Ahí vamos”, tras ver el recital: indudablemente, sería el disco de Soda si Soda hubiera sacado un disco.

Y como respuesta, cabe: este Soda tiene que ver con el momento de Cerati, que empalidece cualquier vestigio de aquel absurdo antagonismo con el “vibratum” ricotero.

Totalmente agradecidos

martes, octubre 02, 2007

El voto por Cristina Fernandez

Como nunca antes me pasó, no estoy seguro de por qué voy a votar tal como efectivamente lo voy a hacer.
Adelanto que conozco mi voto afirmativo; que lo haré, nuevamente, por Ricardo Lopez Murphy. Y que a pesar de haber estado muy convencido de sus virtudes personales, profesionales y públicas, ello no alcanza ahora para dar fortaleza a mi decisión.
Quizá sea por la certeza de la derrota; o, desde otro lugar, por cuanto ello no aporta a un eventual triunfo de la opósición.
Porque de ello sí estoy convencido: soy opositor.
Se lo han ganado los Kirchner: don Nestor y su señora, la senadora y candidata Cristina Fernandez.
No es el lugar para hacer un análisis completo de su gestión; sí para recordar algunos aciertos, que son claros.
Así dos, por sobre todo: el movimiento económico, en evolución y con vaivenes, pero sorprendente recordando lo que fueron los años 2000 a 2002.
Y la política de defensa de derechos humanos. A veces rencorosa, pero necesaria.
Pero son pésimos republicanos. No conocen la integridad del ejercicio de gobierno, no les calienta la posibilidad de que el resto discutamos: creen tener la certeza, y obran en consecuencia.
Atropellan, y eso es un riesgo. Porque cuando la receta no funcione -y eso siempre ocurre, revisemos la historia-, deberían hociquear, con inteligencia, con integridad. Y en cabeza de estos, eso no ocurrirá.
Cuando don Néstor se jacta de no dar conferencias de prensa, se me revuelve el estomago. Pero puedo aceptarle su forma de comunicación: porque al fin y al cabo es, legítimamente, el presidente, y elige el medio de como comunicarse.
Me acuerdo de don Raúl Ricardo, que solo se presento en su gestión por TV ante Tomas Eloy Martinez, en aquel ciclo brillante "Los Argentinos"
Pero cuando Cristina -que no es nadie aún, que es una ciudadana como yo, con la diferencia que ella se candidatea- se niega a dialogar con la prensa, a evitar el intercambio comunicacional con los medios y que solo se dirige del modo -autoritario indudablemente- unipersonal e inoponible que ha elegido, me genera repulsión absoluta.
No quiero repetir lo que ya dije; sí insisto en que alguien que cree que no tengo derecho a pensarla en funcion de otrs inquietudes que no son sus discursos pseudo intelectuales, me boludea, me bastardea. Nos subestima: a todos.
Es por eso que hoy, y a pesar de todo, no solo no quiero votarla. Ya ni siquiera entiendo a quienes votan por Cristina Fernandez.
Porque estoy seguro que a esta altura de nuestra historia, debemos tener autoridad por nosotros mismos, madurar de una vez por todas, y dejarnos de joder con aquellos que, en vez de estar a nuestro servicio, se envician con el poder para dosificar su soberbia.

El Masa.