Charly se va a morir. Pronto.
Es una sensación que me atrapa en los últimos días. No es una especial ilustración; todos lo sentimos, pero el seguro homenaje que devendrá se me ha hecho palpable.
No hay noticias ciertas que lo justifiquen; apenas he escuchado su mediocre "Kill Gil", en versión pirata. Pero su rostro, el desteñido, no tiene prensa cierta en estos tiempos. (*)
¿Valdrá la pena la muerte de García para reivindicarlo? El mas grande artista de rock en castellano de todos los tiempos ha atemperado su propia obra, magistral y acabada, con una sobrevida antigardeliana que, momentáneamente, lo ensombrece.
Es alguien que ha ejercido su divino don, en nuestro favor.
(*) Observación al 31/8/2007: Garcia ha reaparecido con gloria en los escenarios; así lo han reflejado los medios. A su vez, la versión "unofficial" de Gil me ha caído en gracia con el correr de los días.
¿Será todo ello una respuesta a esta entrada?; ¿Vendrá García a la puerta de mi casa para querer cagarme a trompadas?; ¿Lo acompañará Migue?; ¿Cual es el TE de Pipo Cipolatti?.
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